Aceptando el examen de Dios
La despedida de Samuel, el gran siervo de Dios, tiene una nota de satisfacción. Esto, porque puede exhibir ante su pueblo una vida impecable, sin reprensiones: «Aquí estoy; atestiguad contra mí delante de Jehová», dice confiadamente (1 Sam. 12:3). Luego, confronta al pueblo con su propia justicia, diciendo: «Atestiguad … si he tomado el buey de alguno, […]