Santificación: pasada, presente y futura
Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo». – 2 Corintios 4:6. Así como el propio Señor separó a su pueblo de Egipto, él nos separa de la potestad de las […]