América Latina
Gracias por compartir la hermosa labor que el Señor está realizando con ustedes, no sólo en Chile, sino también en Colombia, Bolivia, Brasil, Paraguay, Cuba, México y otros lugares. El Señor les abra puertas con todo su poderoso respaldo, luz, revelación, sabiduría, poder, amor, comunión, y su permanente presencia. Todo eso nos llena de regocijo, y ya veremos los frutos de una abundante cosecha. Sea loado el nombre del Señor.
Arcadio Sierra Díaz / Bogotá (Colombia).
Apoyo
Les agradezco el apoyo tan grande que nos brindan al enviarnos la Revista Aguas Vivas; es una herramienta con artículos de interés y de gran edificación. Una vez más gracias por hacérnoslas llegar y a quienes aportan económicamente para que podamos tenerlas en nuestras manos.
Alfonso Herrera Lastra / Tehuacán, Puebla (México).
Luz
Estoy muy agradecida al Señor por la bendición de este ministerio. Cada mensaje nos lleva al trono de la gracia del Señor, es una luz en estos tiempos tan difíciles que estamos viviendo. Hay un hermano que la está llevando a la ciudad de Anáhuac, mis hijos la llevan a ciudad de Miguel Alemán, Tamaulipas y a Roma (Texas). La compartimos en hogares donde visitamos. Dios los siga bendiciendo para gloria de su nombre.
Amparo Gómez / Mission, Texas (USA).
Conferencia
Somos muy bendecidos con sus publicaciones aquí en Bolivia. Ahora Dios en su gracia y misericordia nos ha concedido recibir las enseñanzas del hermano Christian Chen. Estoy orando para que el Señor nos conceda una conferencia en Santa Cruz.
Erick M. Osuna Oblitas / Santa Cruz (Bolivia).
Blog
Tenho acompanhado o site Águas Vivas e tenho me edificado com as preciosidades postadas lá! Temos prosseguido na doutrina dos apóstolos, na comunhão com os irmãos e no partir do pão aqui. Gostaria que os irmão visitassem nosso blog http://filhovarao.blogspot.com e se possível algum dia venham ter comunhão conosco aqui.
Paulo Almeida de Oliveira / Alegrete, Rio Grande do Sul (Brasil).
Por razones de espacio, las cartas han sido resumidas.
Toda bendición procede de Dios; por tanto, toda la gloria es para Dios